22ª semana.

Esta semana ha llegado la primavera, mi estación del año preferida (cómo se nota que no tengo alergia...), y con ella han llegado las mañanas/tardes al sol, los picnicks, los placenteros paseos en bicicleta y...¡las avispas! :S  Y es que insectos como estos parecen mutantes por el tamaño que tienen...
El lunes comenzamos el día yendo a clase. Es la última semana, ya que terminan muchas de las asignaturas de la primera parte del semestre para dar paso a otras nuevas en la primera semana de abril.
Ese día nos comentó Enisa que estaba interesada en venirse con nosotras a España en mayo para conocer un poquito aquello, pero aún no ha confirmado nada, con lo cual...
Por la tarde fuimos andando al Lidl y, después de la larga caminata, resulta que ese día cerraban. Qué puntería... Después de que, en el intento, casi nos atropella un autobús y nos pitaron los coches al pasar por un paso de peatones. ¿Desde cuándo no tengo derecho a pasar por ellos? Ais, si es que dan ganas de llevar encima un saco de piedras y ponerte a repartir cuando alguno se te pone tonto...Eso sí, al llegar, un transportista que también fue víctima de esto, se nos puso a hablar de Italia, Parma, su familia, etc,etc... Al menos no fue un viaje en balde. Pero pobre, se ve que pasa muchas horas solo delante del volante.
Ya después comenzamos a asistir al curso de italiano intermedio. Tiene narices que todos los que han llegado este semestre (alemanes, ingleses, rumanos, polacos...) lo han hecho sabiendo defenderse en italiano. La profesora estuvo preguntando a qué hora cenamos en nuestros países. Yo flipé cuando dijo un alemán que en su país se cenaba a las 5 ó 6 de la tarde. Cuando nos tocó el turno a Rocío y a mí y dijimos que a las 9 ó 10, la "profe" dijo que ella no podría vivir en España...jiji.
El martes más de lo mismo: fui a clase y el profesor de "Storia della Stampa" nos ha dicho que estudiemos sus libros y que lo hagamos en español con nuestra "melodiosa voz" (palabras textuales). A ver si es verdad que nos entiende... 
El miércoles, en "Editoria Digitale", estuvimos hablando con un chico y una chica, comparando los sistemas educativos universitarios. Los pobres no tienen beca y, además, para ejercer como periodista tienes que hacer un máster muy caro y hacer un examen muy dificil. Aunque lo superes necesitas tener contactos para poder entrar a trabajar en algún medio. La verdad que, visto lo visto, mucha vocación tienen que tener.
Por la tarde, después de comer, aprovechando el solecito que hacía, nos fuimos al Lidl en bicicleta, a ver si esta vez teníamos mejor suerte. Y sí, habéis leido bien: EN BICICLETA. Resulta que las ruedas estaban bien y aunque se hacía un poquillo duro pedalear...a saber cuál era el problema! El caso que fue mano de santo para transportar las cosas aunque también menudo tiempo perdido sin usarla. 
Después estuvimos en el curso de italiano, aunque poco tiempo, porque Cristina y Ainhoa no se habían acordado de que había y se habían presentado en nuestra casa porque queríamos ir mirando los precios para ir a Suiza y a Roma. Terminamos pidiendo unas pizzas y viendo "Españoles por el mundo: Suiza" para tener más o menos una idea de lo que nos encontraríamos. Lo malo que yo terminé con la idea fija de que me quiero ir a vivir a Suiza. ¡Viven geeenial! 
Como se nos hizo un poquillo tarde y estas pobres viven a un buen cacho, les dejamos nuestras bicis para que tardaran menos y al día siguiente me da por preguntarle a Cristina:


- Yo: ¡Cris! ¿Qué tal con mi bici?
- Cris: tu bici es una mierda.
- Yo: ¿y eso?
- Cris: porque tuve que ir casi todo el camino andando porque no era capaz de pedalear.


¡Y he aquí que se me encendió la bombillita! Meses y meses pensando que era yo que estaba en baja forma y resulta que no, que había algo más. Y efectivamente, el problema está en la cadena. Tendré que comprar el 3 en 1 este para engrasarla, y eso si es barato, que si no me aguanto ya así, que tampoco es para tanto.
El jueves invitamos a comer tortilla de patatas y embutidos españoles a Enisa y a un chico de China que ha llegado este año, que se llama...a ver si soy capaz de escribir bien el nombre... Xiaojun Wang, para todos Wang. 


Pero primero de eso fui a clase a las 8 de la mañana, como una campeona, porque quedé con ellos en recogerlos a la salida. Además, iba un personajillo famoso a hablar: Platinette (nombre artístico). 


Trabaja en Telecinque travistiéndose para hacer reir a la gente. Todos pidiendo autógrafos, haciéndose fotos...¡y yo tan campante! Como no tengo tele ni nada pues...
Como iba diciendo, a la salida nos vinimos para casa. Les enseñamos a jugar al UNO, y al final terminaron ganando los jodíos... Eso sí, me reí un montón cuando Enisa y Wang intentaron leer el envase del chorizo. 
Enisa sabe un poco de español, más entenderlo que hablarlo:


- Enisa: CO-RI-SO.
- Yo: ¡no! CHO-RI-ZO.
- Enisa: ¡ah, ok! CHO-IR-ZO.
- Yo: ¡noo! CHO-RI-ZO.
- Enisa: CHO-IR-ZO.
- Yo: ¡que nooo! CHO-RI-ZO.


Bueno, así un buen rato, hasta que ya al final lo consiguió. Qué mal cuando tu cabeza piensa una cosa y por la boca sale otra... 
Wang tardó menos, pero puso más empeño en la Z: CHO-RI-ZZZZZZZZZZZZZO!jajaja.
Después de comer nos estuvo contando costumbres de su ciudad, como por ejemplo que cogen un simio, lo atan a una mesa y le revientan la cabeza para comerse el cerebro mientras aún sigue vivo el animal. Él negaba rotundamente que hiciese eso, pero uf... 
El viernes nos invitaron a una cena en casa de unos italianos que no conocíamos, pero estuvo divertido. Nos prepararon pizza, pasta y tiramisú, con derecho a repetir! :D  
Nos volvimos temprano porque Rocío tenía clase al día siguiente con los peques a las 8 de la mañana. 
El sábado no hicimos "niente" y ya el domingo, con cambio de hora incluido, nos fuimos a cenar a casa de Isaac, que han estado de visita su novia y unos amigos. 
Aquí el cambio de hora no lo noto tanto como en España. En el amanecer sí se nota, y es que con el cambio de hora antiguo salía el sol a las 05:45 h, y claro, a las 6:30 lucía un sol que daban ganas de irse al parque. Pero por lo demás...sí, anochece a las 20:00h más o menos, pero bah...
Y, para terminar la entrada de esta semana, os cuento lo siguiente: ¡a las 3 de la mañana empiezan los pájaros a cantar! Come è possibile? Ahí os lo dejo...

Hasta la semana que viene! :)

21ª semana.

Esta semana me la he pasado casi por completo en España, con lo de la visita sorpresa que conté a grandes rasgos en la anterior entrada, así que ésta va a ser más cortita que de costumbre.
Fueron poquitos días pero bastante bien aprovechados. Me repartí como pude entre mis padres, mis amig@s, mis abuelos, mis perrillos...
Pensé que al ser una visita sorpresa, mi madre no me iba a "cebar", pero en una mañana me preparó todo lo que me gusta o que aún no había probado. Si es que las madres... y las que no son las madres! Porque mis amig@s me llevaron a una yogurtería que estaban los yogures y los gofres de luuuuuuuujo y a un bar que hacen unas tostadas enormes super baratas.
El lunes tuve "cumple" de mi amiga Irene. Nos preparó comida mexicana! :)




También aproveché para ir a la peluquería, comprar algún recuerdillo para Joana, la hermana de Enisa, comprarme algo de ropa, y ya por último ir al Foster Hollywood y a tomar un batido con mis tres chicas preferidas.
Por la noche preparé la maleta y al rato de acostarme me levanté porque salíamos rumbo a Sevilla a las 4:30h. Con esto de que hay que circular a 110km/h...
Lo malo es que nos pasamos la salida a Sevilla y pretendimos llegar rumbo a Córdoba, hasta que llegamos a Azuaga y vimos que aquello no tenía más remedio que volver por donde habíamos venido. Menos mal que habíamos salido con tiempo. Llegamos al aeropuerto a falta de 15 min de que cerrara la puerta de embarque, que a fin de cuentas no hace falta mucho más cuando no tienes maleta que facturar.
A todo esto eran casi las 9 de la mañana, y hasta cerca de las 5 de la tarde no llegamos al piso. Qué horror la mierda del tren... Al menos estuvimos un rato entretenidas con una pareja que venía con nosotras en el avión. Ella había sido estudiante de Comunicación Audiovisual en Badajoz, como nosotras. Una prueba más de que el mundo es un pañuelo. Eso sí, el novio me hizo mucha gracia porque llevaba TODO con la bandera de España.
Ese día no salimos para nada porque estábamos muertas no, lo siguiente. Ya al día siguiente salimos de nuestra madriguera porque nos habían invitado Cristina y Ainhoa a cenar a su casa. Después estuvimos echando una partida al parchís, y para casa.
El domingo me dediqué a comprar los billetes para volver en mayo para la graduación. Los he pillado del 2 al 13 de mayo, porque me niego a un palizón como el de esta semana. Además, a la vuelta me acompaña mi madre hasta el 22, casi para mi cumple. Me hace mucha ilusión llevarla a que conozca todo esto! :)
Ya por la tarde quedamos otra vez con estas dos para ir a H&M, que aquí muchas tiendas abren hasta los domingos. Estuve echando un vistazo en busca de algún vestido para la graduación. Terminamos la tarde con un helado en nuestra heladería preferida, que estaba cerrada por obras. Fue una gran alegría encontrarla abierta porque fue la primera y porque fue a donde acudimos la primera semana cuando estábamos renegadas por encontrar piso.




¿Propósito para esta semana que entra? Salir a correr al Parco Ducale, a ver si conseguimos ponernos en forma para cuando llegue el veranito...
Hasta la semana que viene! :)

20ª semana.

Como decía en la entrada anterior, esta semana la estrenamos con visita a Florencia. No tuvimos que darnos tanto madrugón como cuando fuimos a Venecia, y por supuesto no había overbooking en el tren...
No me sorprendió tanto como Venecia, entre otras cosas porque semanas antes había ido, aunque vi poquísimo. 
Eso sí, hacía un frío hoooorrribleee. De esos que se te meten hasta en los huesos.
Bueno, a continuación unas cuantas fotillos:





También encontramos una tienda muy chula que vendía productos sólo hechos de madera. Impresionaba...





Como ya digo, del frío que hacía no disfruté tanto de la ciudad. Volvimos a las 10 de la noche porque por la mañana nos equivocamos y nos fuimos al quinto pino, ya que no hay tren directo a Firenze Santa Maria Novella, que es la parada principal. Acordaros que hay que bajarse en Firenze Rifredi y allí coger uno a la que os digo. En resumidas cuentas, que tuvimos que recuperar ese tiempo perdido en trenes.
Al día siguiente Silvia y yo fuimos a una fiesta de disfraces Erasmus que se celebraba en una discoteca. Antes de eso fuimos a casa de Cristina y Ainhoa, que nos invitaron a cenar. Qué rico todo...Eso sí, vinieron a echarnos bronca los vecinos de abajo por la música.




Rocío no pudo venir porque tuvo que hacer otra vez noche en el aeropuerto con su hermana y los amigos. La pobre tiene ya un amplio historial en estos menesteres. ¡Que le pongan una cama ya! 
Como iba diciendo, nos fuimos a esta fiesta de disfraces. Nosotras no nos rompimos mucho la cabeza y nos compramos un pack de estos con alas, antenas y varita, a lo hada madrina. No quedó tan mal...





Al día siguiente quise ir a clase, también para ver a Enisa, que si no vamos no nos vemos. Silvia se quiso venir conmigo a "Storia della Stampa" y la pobre, que no entendía mucho, se iba quedando dormida y yo dándole codazos para que no se durmiera, que estábamos en primera fila.
El jueves fuimos a llevar el learning para que nos lo firmara la coordinadora general, pero como no estaba (¡qué novedad!), lo dejamos allí para recogerlo al día siguiente y nos fuimos a H&M, que no sé si lo he contado en anteriores entradas, pero ya me he cargado tres pares de zapatillas y un par de botas desde que estoy aquí. Maldito suelo... 
El caso que no encontré mi número, así que tuve que seguir con mis zapatillas rotas, hasta que Silvia se presentó con unas que me había comprado.  ¡Un muy bonito detalle! :) Bueno, y también la esclava de plata que me regaló...
Nos fuimos tempranito para casa, y al día siguiente, como ya he dicho, fuimos a la oficina de Relaciones Internacionales a recoger el dichoso learning. A la vuelta entré en el supermercado a comprarme un tinte para el pelo, que tenía ya unas canas que "pá qué". Además, como Silvia es peluquera, aproveché! :)
Esa noche invitamos nosotras a Cristina y a Ainhoa a casa a cenar. Preparamos pasta gigante a la carbonara y después de postre había unas galletas rellenas que había hecho esa tarde para que las probaran. Después echamos unas partidas al Uno, con Vincenzo en algunas, y después nos fuimos al pub que hay cerquita de casa, que se celebraba la fiesta siciliana, pero no entramos porque había que pagar 5€ por entrar. ¡Anda ya "paí"!
Ya el sábado lo dedicamos a preparar las maletas. Tenía programada desde hacía meses una escapadita relámpago a España para dar una sorpresa a mis padres y a mis amigas. Silvia me acompañó para dársela a Irene, que son amigas. Fue muy divertido, aunque también muy cansino, porque tuvimos que hacer noche en el aeropuerto. Pero llamar al timbre y que se queden con esa cara de flipados...¡no tiene precio! :D   Desde aquí les doy las gracias a aquellas personas que me guardaron el secreto. 
Y eso es todo... Hasta la semana que viene! 













19 ª semana.

Esta semana, al menos el principio, ha sido bastante light. Sólo cabe destacar que recibí mi primera visita desde España, mi amiga Silvia, y que hemos estado en los carnavales de Venecia.
A principios de semana no hemos hecho nada así interesante porque teníamos que guardar para cuando vinieran nuestras visitas al final de la semana. 
El martes tuvimos prácticas en la TV de Parma. No es una gran cosa, pero tiene unas instalaciones aceptables. Eso sí, nos enseñaron cosas que ya sabíamos, pero nunca viene mal repasar.
El miércoles y jueves me dediqué a preparar las cosas y a hacer la compra para cuando vinieran las visitas, salvo un rato que me acerqué a Bologna a llevar un colchón hinchable que nos dejaron. Y ya el viernes fuimos rumbo a Bérgamo a recoger a Silvia y a la hermana de Rocío y sus amigos, que venían todos juntos en el mismo avión. 
Fue un reencuentro bonito, porque hacía un año exacto que no nos veíamos, y un palizón también, porque salimos de casa a las 8 de la mañana y hasta casi las 6 de la tarde no llegamos. También porque nos equivocamos en los trenes y demás. Además, en el bus que lleva al aeropuerto, se montó el revisor, éste tan famoso que si te pilla sin billete o sin haberlo convalidado te echa una multa de 30€, y a Rocío la pilló. Pobrecilla, pero ya hemos salido escarmentadas...
A la tarde, después de comer algo y demás, nos fuimos a dar una vuelta por la ciudad, para que la conocieran.  
Esa noche nos fuimos a acostar tempranito porque al día siguiente teníamos que coger un tren con destino a Venecia, coincidiendo con los carnavales. Aquello fue horrible. Entre que tuvimos que coger el de las 6 de la mañana, que el viaje duraba tres horas y que nos tuvimos que poner de pie porque iba el tren petadísimo... Nos pusimos a cantar para que se nos hiciera más ameno, y en esto conocimos a Romina, una chica argentina que está haciendo un máster en Ferrara.




(Sí, salgo fatal, y sí, es un pantallazo de Facebook porque no la tengo original).
Estuvimos desde las 10 y algo que llegamos, hasta las 8 de la tarde, y fue más que suficiente. Lo peor es que parece que nos pusimos todos de acuerdo para ir el mismo día. Qué cantidad de gente... Tuvieron que hacer dos carriles en las calles para que se pudiera circular decentemente. Eso sí, PRECIOSA! Si me encantó en esas condiciones...











Vimos unos disfraces super guays, nada comparado con lo que he visto en los carnavales de España.






También había un hombre disfrazado de árbol que, sólo con la ayuda de un serrucho y el arco de un violín, acompañaba la música que ponía en unos altavoces...





... y por supuesto no podía irme sin hacerme una foto con "el Sombrero Loco" de Alicia en el País de las Maravillas.


Después de una intensa jornada, volvimos a casa. Estábamos tan cansados que no amanecimos hasta bien entrado el día. Ya por la tarde salimos a dar una vuelta y a tomar algo, porque Victor, el novio de Cristina, volvía a Madrid. Parecía uno más de "la familia"...
Nos recogimos prontito ya que al día siguiente queríamos ir a Florencia. Y, con la tontería de que tenía que gastar la poca batería que me quedaba en la cámara, nos hicimos una sesión de fotos.







Y eso es todo... Hasta la semana que viene! :)